Quizá tengan razón e incluso estoy madurando. ¿La verdad? no lo sé, tampoco me interesa saber si soy más madura o dejo de serlo, sí, me gusta que me lo digan, me gusta oirlo.. pero no creo que sea madurez, era mi destino. Sigo igual de inmadura que siempre.
Sigo siendo una inmadura enamorada.
Te quiero Miguel (L)